Humanismo Digital

 La Tecnología no es inocente ni neutra. Tras esta precipitada digitalización de todos los servicios básicos, hay una intención y una ideología.

Mayormente ideada por personas sin sensibilidad espiritual, no necesariamente malvadas pero, como estamos comprobando últimamente todos los jubilados, alejadas de un sentimiento humano tradicional.

Adictas a la eficiencia a su manera, con menúes informáticos que, para quiénes tienen, o tenemos, otro paradigma en nuestro corazón, resultan bastante engorrosos y fríos.

Personas que piensan que un gobierno basado en un algoritmo es mejor. Cuya élite la constituyen (o quieren constituir) tecnócratas que decidirán, basándose en una valoración digital, quiénes merecen más consideración y ser publicados o escuchados y vistos en Internet. Un algoritmo que decide el mérito y, en consecuencia, el valor de cada persona del Planeta.

Está todo en los papeles de UMMO, que, por supuesto, no vienen de extraterrestres, sino de una autointitulada 'élite'.

En la Utopía Ummita, un grupo llamado Ummoaeleve dirige un planeta a través de un sistema informático que recopila información sobre las actividades sociales y laborales de cada individuo del planeta. Control absoluto, supuestamente bienintencionado y objetivo. 

Un mundo aséptico, eficiente y 'justo' a su manera, a la manera de los robots, y de quienes piensan como tales y se sienten más cercanos a ellos que a las personas.

Tal vez ello nos evitará guerras, y sufrimientos.

Quizá incluso aprenderíamos a estar a gusto en ese mundo.

Una Utopía Ummita.

El problema es que este bien engrasado sistema (en la teoría utópica, en la realidad tiene numerosos errores que nos complican la vida en lugar de simplificar la como es su intención), puede ser manejado por un pequeño grupo corrupto en el futuro (y quién sabe si no lo está ya) y dar lugar a una TecnoDictadura.

Ya saben vds el aforismo: la mejor forma de tener esclavos es que no sepan que lo son.

Los poderes de este mundo están asumiendo este Mundo Feliz Digital, o Mundo de Yuppiii por motivos mayormente económicos. Ese es otro de los fallos de esta Utopía Digital: menos puestos de trabajo. Millones de desocupados bastante poco cultivados mentalmente. 

¿Que habrá pensado la élite digital hacer con ellos?

¿? Misterio.

Frente a esta utilización de las herramientas digitales desde un punto de vista puramente económico y poco o nada ético, necesitamos elaborar un Humanismo Digital.

Internet sí, pero para las personas.

Mundo tecnificado si, pero para las personas.

Tecnología ética.

Utopía sí, pero ética. Etopía. 

La Espiritualidad debe asumir la realidad digital, pero para crear un Futuro Ético. 

Ni la tecnología ni el dinero justifican la escasez de medios sanitarios, culturales ni alimenticios para las masas humanas.

Dicho esto, debo hacer una reflexión: si mi padre hubiera tenido acceso desde joven a Internet, hubiera estado mucho mejor informado en lo que le gustaba y hubiera tenido una vida más satisfactoria. 

Yo mismo sabría mucho menos de muchas cosas y tendría ideas mucho más limitadas.

Internet es un gran avance. No deseo que se interprete mal está publicación.